El truco está en dejarlo tal cual y añadir posteriormente complementos. De esta forma, lo mismo puedes tener un escenario de teatro que un lavadero de coches, o incluso una casa de muñecas. Sí, funciona completamente como un decorado de esos que se usan en las películas y en las obras de teatro. Tus hijos se sentirán como auténticas estrellas.
Quizá no sea una buena opción escoger un papel pintado con flores grandes para empapelar todas las paredes, por muy grande que sea la habitación. Generalmente, el peso visual de estos papeles es mucho, por lo que podríamos generar una sensación de claustrofobia innecesaria. Recordad siempre eso de “menos es más”.
Las ventanas que se colocan en el techo de las buhardillas son perfectas. Amplias, alejadas de nuestros hijos pequeños y con sistemas de aperturas sencillos para que podamos limpiarlas bien. Además ¿imagináis lo bonito que debe ser dormirse contemplando el cielo?
Otro de los aspectos esenciales en una habitación infantil abuhardillada es la iluminación. Es cierto que suelen ser habitaciones ubicadas en el último nivel de la vivienda, por lo que la luz es mayor. No obstante, si no hay ventanas que sepan aprovecharla, poco haremos.
Quizá no sea una buena opción escoger un papel pintado con flores grandes para empapelar todas las paredes, por muy grande que sea la habitación. Generalmente, el peso visual de estos papeles es mucho, por lo que podríamos generar una sensación de claustrofobia innecesaria. Recordad siempre eso de “menos es más”.
La zona azul claro está reservada para ubicar las estanterías. Así, al azul se le añaden otros matices de color con libros y juguetes. Un acierto también el uso de estanterías de obra, que han pintado con el mismo tono de las paredes. Así, se integran a la perfección en el espacio.
Tal y como sucede en este bonito cuarto, con madera, tonos tierra y tejidos naturales. Desde la alfombra a las lámparas parecen estar hechas de lana marrón, y es que cada vez se buscan las soluciones más respetuosas con el medio ambiente. No se trata solo de parecer natural, sino también de serlo.
Sí, gracias a una estantería también con grandes dosis de asimetría, algo que siempre viene bien para que nuestros hijos puedan aprender rutinas de descanso y trabajo.
Un escritorio independiente para cada uno sería una excelente solución. Hay modelos de escritorios bastante pequeños. No necesitas grandes mesas, tan sólo una superficie en la que puedan escribir, dibujar y leer.
Son habitaciones relajadas y tranquilas, pero, además, muy elegantes. Ten en cuenta que los colores fríos se encuentran en el círculo cromático entre el azul y el verde. Hay cientos de tonalidades diferentes, y todas ellas pueden crear una estancia infantil de lo más elegante y serena.
Se asocia con lo eterno, con el mar y el cielo. Pero, además, es un color relacionado con la fantasía ¿No recordáis eso de los príncipes azules? Que mejor paleta de colores que la azul para llenar de magia y fantasía una habitación infantil.
El patito feo para muchos. Hay quienes odian el gris por recordarles a los días más oscuros, aquellos en los que la lluvia no cesa. La falta de color incomoda en ocasiones, pero en la decoración no. Una habitación con tonalidades grises es, sin lugar a dudas, una habitación elegante y sofisticada. Además, puedes contrarrestar la falta de luz con blancos o incorporar detalles de color con pequeñas piezas.
Quizá no sea el primer columpio de la historia. No obstante, cuando pensamos en uno, seguramente es el que nos viene a la mente. El típico columpio con dos cuerdas y una tabla de madera. Estéticamente nos encanta, pues encaja en cualquier tipo de decoración.
Para terminar, esta idea que también me ha gustado mucho. Cuando la vida en familia se multiplica por dos. Dos niños, dos columpios. Así de sencillo. Ojo, que en este caso, como vemos, está mucho más cuidada la estética, pues se trata de dos bonitas sillas de mimbre sujetas al techo.
Sí, podríamos decir de este espacio que es un espacio con mil detalles. Como bien dice Bea, parecía que la magia de la habitación estaba más que asegurada, gracias a la preciosa chimenea que la preside (yo, además, añadiría el toque de las molduras y tallas del techo). Pero el caso es que hay que tener gusto incluso para aprovechar las habitaciones con algo especial, y Juliette y Tomas lo hacen.