Tener tanto blanco da muchísimo juego, pues, como vemos, ha sido posible incluir notas de color más oscuras a través de la alfombra, el textil de la cama y los propios juguetes. Aún así, si hay algo que destaca es, sin lugar a dudas, esos grandes rascacielos de color azul en la pared.
Las alfombras infantiles de lana, son, sin lugar a dudas, de las más calentitas. Este material natural hace que la pisada sea, además, muy confortable. Puedes encontrarlas con diferentes grosores. Además, también están las alfombras de lana tejida, una verdadera delicia artesanal para la habitación infantil.
Quizá no sea el primer columpio de la historia. No obstante, cuando pensamos en uno, seguramente es el que nos viene a la mente. El típico columpio con dos cuerdas y una tabla de madera. Estéticamente nos encanta, pues encaja en cualquier tipo de decoración.
Todo apunta a que están hechos con pintura, a base de plantillas. No obstante, podría conseguirse el mismo efecto con vinilos. Es más, estoy segura de que los pequeños animalitos que se ven en las ventanas, así como las estrellas y el cielo, sí son vinilos al 100%.
Escoger una pared estratégica (quizá en la que coloquemos la cama o la que se ve nada más entrar por la puerta) y empapelarla con flores, puede ser un gran recurso. Las flores añaden color, añaden diversión y dan un toque diferente a esas estancias de paletas más neutras.
Como una imagen vale más que mil palabras, aquí tienes un poquito de insta-inspiración navideña para decorar la casa. Me encantan las tendencias decorativas de los últimos años, más informales y donde la naturaleza tiene un lugar primordial: ramitas, árboles, piñas, … todo en su estado puro, sin demasiado arreglo, y por si fuera poco económico, original y creativo. ¡Llévate un pedacito de naturaleza para casa!, incluso te puedes llevar a los peques a recolectar los materiales
No todas las habitaciones abuhardilladas o en buhardilla cuentan con vigas, pero si las tienes, aprovéchalas. Asegúrate, primero, de que son resistentes (que suelen serlo, a no ser que sea una casa extremadamente vieja y deteriorada). Si es así, estas vigas, además de darte un plus decorativo incuestionable, pueden servirte de mucho ¿Has pensado en colocar un columpio en el interior de casa? Si quieres que la habitación de tu hijo tenga uno, una viga de madera puede ser el lugar perfecto para incluirlo.
Quizá esa personalidad sea dada por la madera, que contrasta fuertemente con la delicadeza del resto de colores. O quizá con la reinvención de elementos románticos y tan femeninos como las camas con dosel. Una estructura moderna, en este caso, que se niega a presentarse como una de esas camas antiguas casi barrocas. Reinventarse o morir.
Las habitaciones más pequeñas pueden verse muy beneficiadas con las literas. La verdad es que además de ocupar menos espacio que dos camas, cuentan con cierto aire retro. Ojo, que no sólo las hay de metal. Las literas de madera, de estilo escandinavo, son una auténtica maravilla.
Quizá no sea el primer columpio de la historia. No obstante, cuando pensamos en uno, seguramente es el que nos viene a la mente. El típico columpio con dos cuerdas y una tabla de madera. Estéticamente nos encanta, pues encaja en cualquier tipo de decoración.
Los colores fríos están asociados a una sensación de tranquilidad, calma y serenidad. Recuerdan al mar, al cielo y a espacios, en general, muy relajantes. Según la cromoterapia, los colores fríos influyen directamente en nuestro sistema nervioso.
Como una imagen vale más que mil palabras, aquí tienes un poquito de insta-inspiración navideña para decorar la casa. Me encantan las tendencias decorativas de los últimos años, más informales y donde la naturaleza tiene un lugar primordial: ramitas, árboles, piñas, … todo en su estado puro, sin demasiado arreglo, y por si fuera poco económico, original y creativo. ¡Llévate un pedacito de naturaleza para casa!, incluso te puedes llevar a los peques a recolectar los materiales
Para terminar, esta idea que también me ha gustado mucho. Cuando la vida en familia se multiplica por dos. Dos niños, dos columpios. Así de sencillo. Ojo, que en este caso, como vemos, está mucho más cuidada la estética, pues se trata de dos bonitas sillas de mimbre sujetas al techo.
En una época en la que los juguetes parecen sacados de otra galaxia, la verdad es que se agradece, de vez en cuando, ver opciones más tradicionales. Juguetes más humildes que estimulan la imaginación de los pequeños. Juguetes como muñecas de trapo o los de madera, son algunos ejemplos.